Inolvidable Victoria Frente Al Moratalaz

Juvenil A


14/04/2014
Inolvidable victoria frente al Moratalaz

JUVENIL A - Escuela Dep. Moratalaz A


Resultado: 3 - 0

Fecha: 12/04/2014

Hora: 17:00

Estadio: Colmenar Viejo - Alberto Ruiz (Ha)

El Juvenil A se impuso 3-0 al Moratalaz y sigue su particular escalada en la clasificación al lograr su undécimo partido invicto.

Sinceramente, no se ni por donde empezar esta crónica. Todo comenzó el 12 de Agosto del pasado año. Comenzamos a trabajar un grupo de personas en una idea. Desde entonces, muchas horas de calor, de frío, de esfuerzo físico, de esfuerzo psicológico, de estudio de nuestros puntos más fuertes y de los débiles, de estudio de los puntos fuertes y débiles de nuestros rivales.

En todo este proceso, se iba creando algo. Un equipo. Habrá quien piense que un equipo es un mero grupo de personas que hacen una actividad juntas, y en el caso de los equipos deportivos, hasta lucen un mismo uniforme.

El que piense así está en todo su derecho. Pero permítanme, o permítannos, que pensemos que un equipo es algo más.

El partido objeto de esta crónica llevaba en nuestra cabeza una vuelta entera de la competición. El encuentro de ida estaba grabado a fuego en nuestra mente por multitud de motivos. Y ninguno de ellos positivo. No era una espinita clavada. Era mucho mas. Pero además el devenir de la competición lo había convertido en algo más que una ocasión para la redención. La magnífica segunda vuelta del equipo colmenareño lo había ido perfilando como el día D para dar otro paso adelante. Más bien EL paso adelante.

Pero como el destino en ocasiones tiene muy mala leche, lo primero que nos encontramos fue con que a diez minutos del final del último entrenamiento antes del partido, Rober, que se perfilaba de nuevo como central titular junto a Edu, caía lesionado de manera infortuita. Miren, Rober tiene una de las características más representativas del equipo, está dispuesto ayudar donde, cuando y como haga falta. El no es el único que la posee, pero sí creo que es uno de los que más la proyecta en sus compañeros. Y jugadores así, siempre en mi equipo. El equipo primero mostró su preocupación por el, pero de inmediato asumió su ausencia. La mejor manera de ayudarle, sin duda, era haciendo un partidazo. A él, a Julio Serrano, a Sarri, a Alex Romero y Uge en la distancia.

Amaneció un sábado precioso. Solo unas nubes en el horizonte lejano hacia el oeste parecían amenazar sutilmente con tormenta. Y hubo tormenta, pero fue de fútbol.

Desde que se abrieron las puertas del Alberto Ruiz se palpaba una atmósfera de gran partido. Y como siempre decimos aquí para un gran partido hacen falta, sobre todo, dos grandes equipos. Y el Juvenil de la ED Moratalaz es, sin duda alguna, de los mejores de la categoría que ha pasado por nuestro estadio. Para completar la atmósfera, se notó una gran afluencia de público desde el primer momento de la apertura de puertas, tanto otros equipos del club, como familiares y amigos de los equipos en liza, como aficionados al fútbol no directamente vinculados al club ni al equipo, pero que acudieron a la llamada realizada durante la semana a través de carteles y redes sociales. Con la tormenta de fútbol a punto de desatarse, el cielo nos regaló una intensa lluvia durante el calentamiento. La épica también está en las pequeñas cosas.

Los primeros compases del encuentro fueron un claro indicio de lo que nos depararían los primeros cuarenta y cinco minutos. Pese al bullicio existente en la grada, ambos equipos parecían aislados del resto del universo. La ED Moratalaz trataba de mantener su propuesta habitual de juego de toque y circulación, pero el Colmenar cortaba sus líneas de pase merced al formidable esfuerzo de presión desde los jugadores más adelantados hasta los ocupantes de la zaga local y obligaba al rival a dar una vuelta de tuerca a su propuesta. Estos respondían con nuevos movimientos tácticos a la espalda de nuestros centrocampistas, liberando las bandas para sus incorporaciones, pero los nuestros abarcaban metros de campo derrochando sudor. “Usted puede tener la pelota, pero donde a nosotros nos interese”, parecían transmitir los jugadores colmenareños. En defensa, el empuje visitante era aplacado por unos formidables Kike, Adrien, Edu y Marlon quienes con las indispensables ayudas de Julián y Aguirre solventaban las emboscadas del Moratalaz. Hasta los poetas se pusieron el mono de trabajo, como pueden ver. Arriba, Johan volcado a la izquierda, Villa a la derecha y Carlos ocupando metros en la zona central, trataban de aprovechar los escasos espacios concedidos por el conjunto negro. Y en la portería, Durán como ángel de la guarda por si hacían falta milagros.

Con el descanso a punto de llegar, se oyó el primer trueno de esa tormenta de fútbol. Vino precedido de un silbato al indicar el árbitro falta en la frontal del área visitante. De los once titulares franjirrojos, agarró el balón el único que falta por mencionar. Diego colocó el balón en el punto indicado por el colegiado y los habituales del equipo nos comenzamos a relamer, conteniéndonos para no soltar el spoiler a los menos habituales de nuestros partidos.

Diego sacó el cañón a pasear. Y lució una de sus virtudes el día D, a la hora H. En el minuto 45. El balón entró por la mismísima escuadra a la vez que en nuestras retinas con uno de los goles más espectaculares que verá el coliseo colmenareño esta temporada. El talento trabajado tiene cosas como esta, que hace que florezcan las sonrisas justo antes del descanso.

Hay quien llama a estos goles “psicológicos”. Pero igual habría que empezar a pensar en establecer una clasificación entre diferentes tipologías de goles psicológicos. Porque la segunda parte comenzó con otro primo hermano. Si un 1-0 en el 45 supone un golpe a las esperanzas de cualquier equipo, díganme ustedes un 2-0 en el 50. Con su familia en la grada tras un viaje maratoniano desde la otra punta del mundo, Johan abrió el tarro de las esencias. Robó un balón desde la posición de extremo izquierdo, y comenzó a sortear rivales hasta plantarse en el área, con ese aire de quitarse importancia que tienen poquísimos jugadores en el mundo. Pienso en finos estilistas. Zidane, Ozil, Iniesta, Benzema. Y pienso en uno de los asistentes al coliseo colmenareño, un señor que llegó a volar sobre Querétaro cuando ganar un Mundial era una quimera para nuestro país, y del que decían que era capaz de parar el tiempo dentro del área. El gol no solo puso el orgullo en la familia Cuarezma, que también, sino en toda la familia colmenareña. Quedaba decretado el estado de ilusión.

Con el Moratalaz aún groggy pero sin caer a la lona, el conjunto franjirrojo tuvo ipsofacto otra oportunidad para rematar el encuentro, con una sensacional jugada de Villa recibiendo un balón al espacio que si no acabo en gol fue sin duda porque el destino, ese caprichoso que hablábamos antes, prefiere que lo haga en Valdebebas, para que de paso descansen algo las redes del estadio colmenareño. Pese al susto de esa jugada, el Moratalaz volvió a dar muestra de su inmensa competitividad negándose a bajar los brazos, lo que puso al equipo local en paraje de cambiar de registro. Je.

Comenzaron a llegar los cambios. Carlos Forcano abandonó el césped colmenareño ante los aplausos de una afición que le había visto acumular kilometro tras kilómetro para su equipo, entrando el formidable Alex Gil para apuntalar el trabajo en la medular. Y siguieron llegando oportunidades para los nuestros, el árbitro anuló un gol por fuera de juego de Edu que había rematado implacablemente, impecablemente y varanísticamente una falta lateral. El conjunto rival seguía aumentando revoluciones en su motor, pero entre la defensa y un formidable Durán los sustos se quedaban en suspiros y medias sonrisas. Al partido le quedaban por pasar cosas. Llegaron más cambios para el conjunto local, saltando Mansilla y Alex Ventura al escenario, jugadores en plena progresión que incrementan el potencial ofensivo del conjunto. Y en la primera que tuvo este último, quebró la cintura del defensa y la puso ahí, en la cepa del poste. Querido mundo: AV11. Remember my name. También Mansilla tuvo su oportunidad pero el fenomenal achique del guardameta visitante evitó el gol del canterano colmenareño. Para terminar de apuntalar la ilusión y que nada emborronara el precioso resultado que reflejaba el luminoso saltaron al campo Asier y Jose, recibiendo sonoras ovaciones en el momento respectivo de ingresar. Y ellos devolvieron esos aplausos con creces, suponiendo una ayuda inestimable para remachar un encuentro tan precioso como brutal en lo físico para todo aquel que llevara una franja roja en el pecho. O en el corazón.

Miren, todo ha vuelto a comenzar un 12 de Abril. Nos quedan muchas horas de calor, algunas de frío, de esfuerzo físico, de esfuerzo psicológico, de estudio de nuestros puntos más fuertes y de los débiles, de estudio de los puntos fuertes y débiles de nuestros rivales.

Pero sobre todo, nos quedan ocho jornadas, y no tenemos nada que perder. Y además, ya tenemos la parte más importante y difícil de lograr:

Estemos en el césped, en el banquillo, o en la grada…Somos uno. Somos equipo.

No lo veremos en la prensa, no lo oiremos en la radio, pero seguro que no lo olvidaremos: Durán, Marlon, Kike, Edu, Adrien, Julián, Aguirre, Diego, Johan, Villa, Carlos Forcano, Alex Gil, Mansilla, Alex Ventura, Asier, Jose, Rober, Sarri, Julio Serrano, Uge y Alex Romero desde la distancia, Miguel, Juampe, Alexis, Carlos, Kike, Pablo, Manu, Roman, Viktor, Manu, Sergio, Arturo, Fer, Julen, Sorin, Natalia, Antonio, Alejandro, Guille, Alex, Santi, Lorite, Nacho, Charly, Adri, Mikele, Emilio, Víctor, Sergio, Carlota, Irene, Edu, Rubén, Carlos, Víctor, Baro, Parra, Jorge, Isam, Diego, Paula, Dani, Pili, Laury, Carlos, Juani, Charly, Nuria, Juan Manuel, Alfonso, Jose, Marinar, Lucia, Pablo, Miguel, Nani, Julián, Paloma, Antonio, Iker, Jackie, Melissa, Jorge, Paula, Eloy, Candi, Maria Isabel, Juan Pedro, Yoli, Julia, Almudena, David, Raúl, Fernando, Ana, Adrian, Inés, Fco Jose, Juanjo, Alberto, Julio, Adela, Rober, componentes de los equipos Juvenil B, Cadete B, Cadete A, Aficionado B, y Femenino Senior, entre otros.

(Y gracias!)

1-0


2-0


3-0

CARGANDO... POR FAVOR ESPERE