Planteamiento valiente y atrevido del Colmenar Viejo fuera de casa ante un rival incómodo asentado en los puestos de arriba de la tabla, que salió con mucha fuerza los primeros 20 minutos encerrando al Colmenar en su campo. Una vez se sacudieron esa presión inicial, las chicas Colmenareñas empezaron a combinar jugadas e hilvanar jugadas de peligro sobre la meta del Alcobendas, con lo que el partido fue ganando en espectáculo paulatinamente.
Ese espectáculo también fue sinónimo de tensión y emoción, con dos equipos muy igualados, que hicieron llegar el resultado con empate a 0 al descanso fruto de ese equilibrio que ambos demostraron.
Sin embargo, al filo del descanso el partido pudo cambiar por completo, ya que un tiro de Lara a puerta vacía y con la portera fuera de sitio, fue interceptado por una jugadora rival con la mano, lo que significaría un clamoroso penalti y la consiguiente expulsión de la defensora del Alcobendas. Se podría haber puesto todo de cara con 0-1 y una jugadora más sobre el campo, pero aún se está buscando la explicación de por qué el árbitro hizo caso omiso ante una situación tan clara, donde no había nada que discutir ni dejaba lugar a dudas.
Tras saltar de nuevo al terreno de juego después del parón, llegarían los primeros goles para ambos equipos, siendo las jugadas a balón parado las protagonistas, ya que sendos goles llegaron tras un saque de esquina en los minutos 50 y 52, mostrando la alternancia de oportunidades que ambos conjuntos tenían.
La línea del partido continuó similar, con otro gol local que fue al poco tiempo neutralizado por las Colmenareñas en el minuto 80. El intercambio de golpes más se parecía a un combate que al propio partido de fútbol, donde si se encajaba un golpe, automáticamente se devolvía otro igual de contundente para equilibrar la balanza.
Parecía que el partido acabaría con un merecido empate después de un partido muy trabajado, pero nuevamente el árbitro se erigió en protagonista a falta de 2 minutos para el final, dando continuidad a una jugada de ataque de las locales, que partían en un más que evidente fuera de juego por varios metros. Ésta vez sí decidió ver la jugada con "buenos ojos" a favor del Alcobendas, lo que condenó injustamente al Colmenar Viejo a una derrota inmerecida por 3-2, que ni mucho menos va a minar la moral de las chicas, que mejoran por momentos y plantan cara a todos los favoritos.
Aprovechamos para felicitar el trabajo como equipo que se ha vuelto a demostrar y a dos nuevas goleadoras: Inés Gómez y Noelia Rivas, que con sus goles alimentaron la esperanza de sacar un gran resultado y suman sus primeros goles de la temporada para aumentar las estadísticas del equipo.
