Vuelta A La Realidad

Después de un gran mes en cuanto a resultados y juego, con tres victorias y un empate, el Juvenil A cae derrotado en Valdebebas ante un Real Madrid que se mostró muy  superior durante todo el encuentro. 4-0 fue el resultado final.

A sabiendas de que el rival era el más fuerte dentro de la categoría y que puntuar en Valdebebas es una misión casi imposible, la ilusión por los últimos resultados cosechados nos hacían soñar con otro buen partido de los colmenareños.

Desde el inicio el equipo local se adueñó del partido, y sin apenas tiempo un córner rematado ante la escasa intensidad defensiva de los nuestros suponía el 1-0. Gran error el recibir un gol en situaciones donde las fuerzas de los equipos se igualan cuando a priori el rival es superior. A pesar de ello el equipo continuó trabajando. La intención era no meterse atrás e intentar defender en campo contrario, pero unas veces la falta de concentración e intensidad y otras la calidad de los futbolistas madridistas hacían replegar a las filas colmenareñas, que hasta el momento se defendían bien. A pesar del dominio local y de sus oportunidades erradas, Luismi y Yuya fueron protagonistas de varios acercamientos con peligro para los nuestros.

Si ya la primera mitad tuvo un dueño, la segunda fue completamente para los blancos. Los de Colmenar empezaban a notar el esfuerzo realizado a nivel defensivo, y con ello se reducían las llegadas a portería. Entró Julián para dar oxígeno a la línea medular. Pero otra vez pronto, en el 8 de la segunda, un mal despeje era aprovechado por el medio centro madridista para anotar el segundo desde dentro del área. El partido continuó con arremetidas madridistas y trabajo defensivo de los serranos que no salían de su campo. Sufrimiento físico y mental para un equipo acostumbrado a tener el balón.

En el 70 de partido el Colmenar agoto todos sus cambios, entrando Pablo, Aguirre, Alex y Villa. Los últimos minutos fueron la culminación del castigo para los nuestros. En el 88 un jugador madridista conducía el balón hasta las inmediaciones del área ante la escasa agresividad defensiva de los nuestros y cedía el balón a un compañero para hacer el tercero. Minutos después, en el 92’, una internada por el costado izquierdo con tiro a portería cerraba la cuenta.

No es más que una derrota que sirve para volver a la realizad. Los nuestros despertaron de un sueño que poco a poco fue convirtiéndose en pesadilla. La realidad también fue que el Real Madrid es un gran equipo, demostrando porque ganará esta liga.

Ahora, con los pies en el suelo, volvemos a tener un nuevo objetivo; ganar al Coslada en el Alberto Ruiz. Un duro rival, pero de nuestra liga.